A la escoria de este país (Colombia)

A la escoria de este país (Colombia)

Profecía:

El pueblo quiere ver en la arena a sus hampones,
los balcones están llenos hasta las banderas,
el morbo es total.
Y arreados entraran en gritos al recinto.
Entretanto el calor en las calles se incrementa
para alzarlos en desplantes,
y con insultos de todos los pelambres,
ellos esperaran.
Y como ratas saldrán, de su guarida,
atónitos en sus miradas esperando manotazos y gargajos,
de nunca esperar.
Miserables gritaran, el pueblo enardecido ya está,
Miserables que nunca volverán.

- Estas salidas heterogéneas que el gobierno y el congreso están adelantando es un perfecto golpe de Estado que ellos mismo se están dando. Ahora acuden con prontitud a la escuela aristotélica de los silogismos para urdir, construir salidas legales con apariencias de verdad.

Insisto el problema ya no es jurídico sino de legitimidad. No se entiende como los mismos que promovieron, propiciaron el adelanto de la ley constitucional (reforma), ahora se develan como los primeros opositores a los que ellos construyeron.

Todas las argucias, galimatías jurídicas que se quieran adelantar para deshacer los pasos ya es tarde. El problema ahora es político, y esto lo deben de entender los burócratas hampones que rigen los destinos de este miserable y desgarrado país.

Los resultados de todo lo que se está registrando hoy se comenzará a observar en seis meses, Colombia entra desde ahora en un limbo, en un stand by, y no propiamente por la crisis europea sino por el nerviosismo colectivo que se va a sembrar en todos los sectores de la economía nacional.

Al no haber credibilidad no hay legitimidad, deriva en problemas de gobernabilidad. El capital político del ejecutivo queda en ceros, no hay capacidad de maniobrabilidad para adelantar políticas de gobierno. Todo esto hace que los proyectos de ley (reforma tributaria, código de tránsito, etc.) quedan sepultados hasta tanto no se resuelva el futuro del Estado.

El solo hecho de estar contemplando - en las calles - la posibilidad de un referendo, una constituyente, que nadie sabe donde puede llegar, crea una incertidumbre total en todos los ambientes de negocios. Sin duda los primeros afectados serán los mercados de valores con destrucción de riqueza, los futuros planes de expansión de inversión prenden sus alarmas.

En este orden de ideas la atención nacional está centrada en ver, con emoción, la gallera que se va a formar en el templo de la corraleja de Colombia (Congreso) en sesiones extraordinarias.

La novela apenas comienza